En nuestra búsqueda constante de la felicidad y el bienestar, muchas veces tendemos a rechazar las emociones negativas, considerándolas obstáculos en nuestro. Sin embargo, un nuevo enfoque en la salud mental nos invita a reconsiderar esta perspectiva. Un artículo reciente del New York Times, titulado «El papel de las emociones negativas en la salud mental», sugiere que estas emociones podrían tener un impacto profundo en nuestra vida emocional y nuestro bienestar general. ¿Podría ser que las emociones negativas no sean tan perjudiciales como creíamos?
Explorando el lado oscuro de nuestras emociones
Las emociones negativas, como la tristeza, el enojo y el miedo, generalmente se consideran incómodas y no deseadas. Sin embargo, estas emociones pueden tener un propósito vital en nuestra experiencia emocional y en nuestra salud mental. La psicóloga Lisa Feldman Barrett, autora del libro «Cómo las emociones están hechas en realidad», sugiere que todas las emociones, tanto positivas como negativas, tienen una función adaptativa en nuestras vidas.
En lugar de tratar de evitar las emociones negativas, podríamos beneficiarnos al tratar de comprender su propósito y aprender a manejarlas de manera saludable. Las emociones negativas nos ayudan a evaluar situaciones de peligro o amenaza, activando respuestas de supervivencia y movilizando nuestros recursos internos para hacerles frente. La tristeza, por ejemplo, nos permite procesar y sanar de una pérdida significativa, mientras que el miedo nos alerta sobre posibles riesgos y nos motiva a tomar medidas preventivas.
El equilibrio entre las emociones
La salud mental no se trata de eliminar por completo las emociones negativas, sino de lograr un equilibrio emocional en el que tanto las emociones positivas como las negativas tengan lugar. Ignorar o suprimir las emociones negativas puede llevar a problemas de salud mental, como la depresión o la ansiedad. Permitirnos sentir y expresar estas emociones de manera saludable puede conducir a una mayor resiliencia emocional y a un mejor bienestar general.
Herramientas para manejar las emociones negativas
Existen diversas técnicas que nos pueden ayudar a manejar las emociones negativas de manera constructiva. La práctica de la atención plena, por ejemplo, nos invita a ser conscientes de nuestras emociones sin juzgarlas ni resistirlas. También es útil hablar con alguien de confianza, como un amigo o un profesional de la salud mental, para compartir nuestras preocupaciones y obtener apoyo emocional. Además, el cuidado personal, como el ejercicio regular, una alimentación equilibrada y el descanso adecuado, puede fortalecer nuestra capacidad para hacer frente a las emociones negativas.
En última instancia, las emociones negativas no deben ser vistas como enemigas de nuestra salud mental, sino como señales importantes de nuestro mundo interno. Al aprender a reconocer, entender y manejar estas emociones, podemos construir una relación más saludable con nosotros mismos y con los demás. La clave está en encontrar un equilibrio emocional en el que las emociones negativas sean tratadas con la misma consideración y aceptación que las emociones positivas. Al hacerlo, estaremos cultivando una mayor comprensión de nuestra salud mental y nuestro bienestar en general.
Artículo original: https://www.nytimes.com/2023/04/21/well/mind/negative-emotions-mental-health.html