En el modelo MRI, cada ficha “sesión por sesión” finaliza con un apartado de predicciones y planificación. Este paso no es un simple cierre administrativo: es una herramienta estratégica para anticipar escenarios y preparar intervenciones más eficaces.
Qué implica hacer predicciones
El terapeuta registra qué espera que ocurra en el consultante o en su entorno antes del próximo encuentro. Estas predicciones pueden referirse a:
- Cambios en el motivo de consulta.
- Reacciones frente a prescripciones.
- Aparición de resistencias.
- Modificaciones en las soluciones intentadas.
El objetivo es imaginar la posible evolución del caso a corto plazo, con base en lo observado y en la dinámica del problema.
Por qué es útil
Realizar predicciones permite:
- Verificar si las hipótesis del terapeuta son correctas.
- Ajustar la estrategia rápidamente si la realidad no coincide con lo anticipado.
- Preparar intervenciones alternativas para distintos escenarios.
- Mantener un seguimiento proactivo, en lugar de reactivo.
La planificación como continuidad
Junto a las predicciones, se define la planificación para la próxima sesión:
- Decidir si se continúa con la misma estrategia o se introduce un cambio.
- Determinar el foco de la próxima intervención.
- Anticipar posibles obstáculos y cómo afrontarlos.
Este ejercicio ayuda a que cada sesión se inserte en un proceso coherente, evitando que la terapia se convierta en una serie de encuentros aislados.
Basado en el libro: Cómo equivocarse menos en terapia. Hugo Hirsch y Ruth Casabianca