Me llevo enseñanzas y funcionamiento de un método de trabajo particular, en el que no estaba familiarizado, y que gracias a los compañeros del centro he podido ir interiorizando y hacerlo mío. Lo que más me gustó fueron las Cámaras de Gesell. Me pareció un espacio de aprendizaje importante, ver como el equipo desde la otra banda del espejo armaban una intervención y como se ejecutaba. También me gustó poder asistir a entrevistas de admisiones psiquiátricas.

Siento que he aprendido enormemente una forma diferente de acercarme a los casos que recibimos, que me ha permitido incluso cuestionar mi manejo habitual de los mismos. He disfrutado de la oportunidad de conocer el modelo a nivel teórico y, simultáneamente, su aplicación práctica en diversos ámbitos (terapia individual, grupal, de pareja, emergencias psiquiátricas…), lo que me ha permitido integrar estrategias y habilidades novedosas para mi. Todo ello en un entorno sencillo y cercano, en el que los profesionales han sido en extremo acogedores, invitándome a participar de todos los espacios posibles.